Aquí reciben a l@s que andamos interesd@s en vivir una experiencia más en la vida , y claro como no, nosotras nos apuntamos!
Es un lugar de meditación, descanso y donde aprendes sobre la práctica budista, con la meditación Vipasana como centro. Yo no lo soy, aunque el tema de la presencia y la conexión conmigo para así entenderme mejor me parecen fundamentales.
Llegamos en un mini bús, tras 6 horas de curvas imposibles para recorrer los 145 km que separan Wat Pa Tham Wua de Chinag Mai. Caminamos 1km a las 4 de la tarde a ochocientos mil grados con un mochilón, y por fin llegamos!
Un lugar tranquilo, precioso, con un río, rodeado de montañas y donde el único sonido que oyes es el agua y la infinidad de pájaros que no dejan de cantar, increíble!!!
Entramos así como en casa, nos acompañaron a nuestra cabaña, nos dieron ropa blanca y listo!!
Andábamos pérdidas con los horarios y el ritmo, así que nos enteramos de que la Vipasana meditación era a las 18,30 y allí estábamos, junto con las otras 40 personas que andan por aquí viviendo su experiencia.
El día comienza a las 6,30, hay un ritual en el que le ofreces el desayuno a los monjes. A las 7 desayunamos nosotras. Y a las 8 se practican 3 tipos de meditación:
Walking meditation (paseando muy lentamente por el bosque).
Seating Meditation (posición loto o piedra).
Laying meditation (tumbadas).
Y precisamente hoy, justo antes de la comida (exquisita y natural por cierto) cuando el monje hablaba de alimentar a tu cuerpo con la finalidad de cuidarlo, respetarlo y llegar a la conexión contigo, me ha venido esto:
Si no cuidas tu cuerpo, lo escuchas, lo respetas...Cómo pretendes que lo hagan los demás? Estas pidiendo algo que tú no haces. Pides un respeto que tú no te das.
Está claro que socialmente nos lo han puesto difícil, que vemos como lógico la cantidad de alcohol, tabaco, drogas, productos que supuestamente alimentan..Venga "Tó palante"!!
El vale todo, el suplo carencias, el así olvido, el me sienta bien, el si yo estoy muy bien y mi relación conmigo y con los demás es alegre, tranquila, paciente...el mal de muchos consuelo de tontos y el peor de todos, el no me entero de nada porque está tan incorporado todo socialmente que no me lo planteo, eso sí, insomnio, soriasis, digestiones imposibles, migrañas, diabetes, ansiedad, depresión, insociabilidad, irresponsabilidad, agresividad....
Está bien la polaridad de vez en cuando con consciencia, sabiendo donde un@ está (yo he vivido en un extremo mucho tiempo, no tenía ni idea, y a día de hoy, hay placeres momentáneos que a veces me gusta tener) aunque para ello es necesario salir de todo este enganche social, para poder decidir cuando quieres entrar, para luego salir.
Cuida tu cuerpo, dale alimentos de verdad, escucha lo que realmente te pide (tu cuerpo no la mente)
Si de verdad quieres cambios, empieza por ti, que realmente es lo único que tienes.
Se constante, no te rindas porque cada vez serás más libre y esa libertad no tiene precio.
Esta es mi experiencia y mi camino. Soy una mujer social que busca un equilibrio personal para seguir disfrutando con presencia y libertad.
Abrazo infinito.
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